Esta tecnología consiste en un deshidratador para alimentos que funciona con energía solar. Se ocupa principalmente para deshidratar tomates y otras hortalizas y tiene una capacidad de seis bandejas. La estructura es de madera; las puertas del frente y de arriba están hechas de vidrio para aprovechar la luz solar. Las paredes laterales están forradas con malla Raschel en función de una correcta ventilación. El deshidratador cuenta con unas ruedas debajo de la estructura, lo que le otorga movilidad para aprovechar de mejor forma la luz del día.
| NOMBRE TECNOLOGÍA | Deshidratador solar |
|---|---|
| Realizadores | Fresia Bustamante |
| Comunas | El Cardal |
| Zona | Centro |
| Territorio | Valle |
| Descripción de tecnología: artefacto o proceso | |
| En qué consiste | Deshidratador para alimentos |
| Problema que busca resolver | Mejorar producción sin costos asociados. |
| Materiales | Vidrio, madera, malla Raschel. |
| Aspectos técnicos | Deshidratador que funciona con luz solar. |
| Costos y dificultad | Costo bajo, dado que no se necesitan mayores materiales para su construcción, y nivel bajo de dificultad. |
El Cardal es una localidad aledaña a la comuna de Paredones. Entre sus actividades económicas más preponderantes se encuentran la agricultura, la ganadería y el comercio al por mayor y menor. Uno de los grandes problemas que enfrenta la zona desde hace más de diez años es la creciente escasez hídrica, que ha perjudicado el proceso productivo de los agricultores. La comunidad también debe lidiar con problemas asociados a la plantación de monocultivos, a la plaga de cosechas y a la erosión de los suelos producto del cambio climático. Todo esto ha generado que los habitantes deban buscar herramientas alternativas para mejorar la producción y no depender de factores externos para su desarrollo.
El deshidratador de alimentos fue construido por Fresia Bustamante, pequeña agricultora de la zona de El Cardal. Gracias a las visitas a otros usuarios de Prodesal en la región, pudo conocer el proceso y la maquinaria necesarias para deshidratar distintos alimentos, en base a lo cual desarrolló una versión propia. Para su construcción reutilizó tanto el vidrio como las ruedas; los gastos solamente fueron por la mano de obra. Adicionalmente instaló la malla Raschel, para mejorar la ventilación de la estructura. Gracias al deshidratador, Fresia ha creado variaciones de los productos ofertados tradicionalmente, como tomate deshidratado, lo que le ha permitido ampliar su oferta de productos agrícolas. Sin embargo, la ausencia de lluvias presentada a principios del año 2021 ha perjudicado la cosecha y con ello el uso del deshidratador se ha visto disminuido.
Este tipo de tecnologías puede inspirar a personas que busquen herramientas basadas directamente en la luz solar, es decir, que no necesiten de energía eléctrica para funcionar. Además, esta tecnología permite ampliar la oferta de productos asociados al cultivo de hortalizas, sin mayores costos asociados.
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